Diciembre es un mes especial, al menos así lo considero yo, está lleno de fiestas, de aglomeraciones en los centros comerciales , lleno de exámenes finales para los estudiantes...Las personas se preparan para despedir el año.
Te pueden gustar más o menos las navidades, en mi caso, por ejemplo, me encantan por el contrario no se da el caso en todos los miembros de la familia y, aunque no gusten, te acabas impregnando en ellas. Vas a hacer las últimas compras del año, preparas una cena especial para toda tu familia y llenas tu casa de coloridos adornos y incesantes luces parpadeantes.Todos hacemos la navidad. Incluso las transmitimos geneticamente a nuestros hijos, sobrinos, nietos...Existe un comportamiento humano en "las navidades" que realmente no entiendo al cien por cien.
Otra cosa que hacemos todos el último día de año es hacer un pequeño resumen , en nuestras cabecitas, un pequeño balance de lo que fue, lo que es y lo que nos gustaria que fuera. Recordamos instantes, personas, dias...a veces , sonando lejanos en nuestras cabezas pero notando como pegan fuertes en nuestro corazón.
Las cosas cambian, gente que se va y gente que viene... Esa es a la única conclusión realmente clara a la que llegas. El pasado... pequeño juguete de doble filo, que puede llegar hacer mucho daño, muchismo dolor.
El futuro, sin embargo...puede llegar a dar mucho miedo si te paras a observarlo. Te surgen cientos de dudas. Empiezas a darle vueltas a cómo pequeñas partes realmente importantes en tu presente, en un futuro , serán piezas del pasado...piezas que realmente te harán llorar, sufrir.Y sabes que llegará un futuro en el que tu madre ya no será la que esté haciendo ruido con los platos en la cocina, corriendo de un lado a otro como loca para que no falte ni un sólo detalle en la mesa el día de Navidad. Y, ese sentimiento te recorre todas las partes de tu cuerpo. Sabes que ese día llegará e intentas fotografiar en tu mente esta imagen, la del presente. Y, por otro lado, sabes que el presente te deparará cientos de otros momentos felices porque aún no has empezado a vivir, como quien dice. Y, confías en hacerte mucho más fuerte con los años, es la esperanza a la que te aferras. Comprenderas que los cambios son parte de la vida, que formarás tu familia, y que nunca olvidarás estos momentos. Sonries al ver nuevas caras, que tu familia esta creciendo. Ves una vida que está empezando y...sonries. Sonries porque comprendes que lo más importante en este pequeño mundo es la familia, tu familia.Feliz año para toda las familias , ya sean hermanos, padres, amigos, tios, primos, abuelos...porque tu familia son aquellas personas a las que les tienes un huequecito muy importante en tu corazón. Feliz 2012.
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