Y lenta, muy lentamente, también olvidas los sabores de las cosas, y las cosas que duelen de verdad. Incluso cosas que creí que nunca podría olvidar se desvanecieron lentamente en el olvido. Los chicos del pasado, los que eran torpes, las chicas guapas, las que eran inteligentes, quién fue a qué universidad, de quiénes fueron las mejores fiestas. Terminas por olvidar todo eso. La gente que te dijo que te quería. La gente a la que amaste de verdad. Incluso a la gente que pensaste que recordarías hasta el final.Es por todo eso por lo que las ondas de la memoria se hacen tan finas, porque se pueden olvidar esas cosas ,para hacer posible que podamos amar a otras personas en el futuro.
Aunque siempre quedan huellas, siempre. Y son esas huellas las que te hacen , de repente, caer en una espiral de recuerdos y, a veces sonries...
Sería bonito...
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